Después de un periplo de dos temporadas en el Real Madrid, el mediapunta danés se fue al Kobe, donde disputó 15 partidos y anotó cinco goles. Andrés Iniesta ha posado esta mañana en Tokio con la camiseta de su nuevo club, el Vissel Kobe, propiedad del magnate japonés Hiroshi Mikitani, que a su vez es el responsable de la empresa Rakuten, principal patrocinador del Barcelona. Además, Menezes ha llamado también a Marcelo, a los jugadores del Barcelona Adriano y Daniel Alves y al portero del Valencia Diego Alves. Porteros: Diego Alves (Valencia-ESP), Jefferson (Botafogo) y Víctor (Atlético Mineiro). Fue anunciado ante el público: "Presentó el mundo de las letras a cinco mil niños de estas comunidades. En colaboración con once ONGs ha construido una biblioteca con tres mil libros". Pronóstico: Los cafeteros, avalados por su extraordinario despliegue, parten con ventaja ante un rival mermado en el ánimo por la ausencia de Luis Suárez.
Los menores de edad son los camellos, los rateros y los coheteros situados en las entradas de las favelas para lanzar un cohete si se acerca la policía o una banda rival. Amarilla a Óscar Gil, que llega tarde y pisa a un rival. Es increíble que no deje terminar la jugada el posible penalti cuando iba a rematar Mir a gol. Seguro que será un grandísimo entrenador. En Samara, tras un rato sin aparecer en plano, su carita era el aviso más claro para Pekerman, el entrenador. Algo que provocó que el parto se adelantara dos semanas y el principito naciera con poco peso, lo cual sumado a que era el ansiado nieto varón del emperador, contribuyó a que haya sido hiperprotegido. Urawa Red Diamonds: Este equipo clásico de la liga nipona tienen un nombre con poco misterio, pero su origen está en que el equipo nació al albur de la marca de coches Mitsubishi, cuyo logo son tres rombos rojos. Bandas que en lo más alto de la favela llegan a organizar la Feira das Drogas, una fiesta de consumo de crack y cocaína, vendidas en puestos como chucherías, y prostitución de menores. Hubieran firmado el pacto de no agresión sin ningún problema, pero la fiesta tenía dos pistas a controlar.
Un respiro para las 16 selecciones supervivientes, que afrontan a partir del sábado el tortuoso camino hacia la final del 13 de julio en Maracaná. La colección incluye modelos de tus equipos favoritos, así como de las mejores selecciones de fútbol del mundo. Sus puntos fuertes son el regreso del pantalón azul marino y del dorsal en rojo. Eso sí, si se atreven a presentarla en Rusia con pantalón amarillo, se llevarán mi aplauso. Panamá. La otra selección a la que New Balance viste en Rusia es también de la CONCACAF. Polonia, la única que no se jugaba nada, se adelantó a los japoneses, eliminados en ese momento. El marcador en ese momento favorecía a Senegal, primera de grupo por el empate entre Japón y Senegal, la otra pantalla en juego ayer en el turno de tarde. Segundo, por el detalle de la parte izquierda de la camiseta mundial japón, con unas formas geométricas inspiradas en la ‘mulera’, la alforja que llevan los cafeteros colombianos colgando en ese hombro.
Sus cuadros (el sahovnica) son los que son. Dice Otávio que lo último que quieren los narcos son libros en la calle. En España son más difíciles de encontrar en tiendas físicas. Consadole Sapporo: Más referencias a España. Tiene muchos problemas España para generar ocasiones. Le faltó claridad ofensiva, sobre todo a Mané, su mejor delantero, para crear más problemas a Ospina, siempre acosado por jugadores de verde, pero sin disparos que atajar. Su prueba sería la cuerda floja y tenía que caminar ocho metros sobre ella. Parece uno de esos uniformes que te compras por docenas para jugar con los amigos al futbito. Ahora, en Brasil, suma ya cuatro y si logra batir a Benaglio, igualará el récord de Stábile, que en 1930 enlazó cuatro jornadas mundialistas marcando para Argentina. Cuatro días antes del Mundial murió tiroteado un menor y fue herido un policía. Mick Jagger continúa la gira mundial de conciertos con The Rolling Stones. Entre otras cosas porque tras 48 partidos se han marcado 136 goles, sólo nueve menos que en todo el Mundial de Sudáfrica. Los suramericanos sufrían menos en defensa, pero arriba apenas aportaban nada.